Semilogía Cardiovascular: Pulso Arterial

2.2.- Pulso arterial

Las alteraciones en la morfología del pulso arterial más importantes
y las situaciones típicas en que aparecen son:
Pulso bífido o bisferiens: se caracteriza por dos picos sistólicos.
Aparece en situaciones en las que se expulsa con rapidez,
abundante volumen por latido desde el ventrículo izquierdo:
doble lesión aórtica, insuficiencia aórtica y miocardiopatía
hipertrófica obstructiva.
Pulso anácroto: es un pulso de ascenso lento, caracterizado
por presentar una muesca en la rama ascendente (muesca anácrota).
Es característico de la estenosis aórtica, en que también
se produce un pulso de escasa amplitud, por lo que se denomina
parvus y tardus.
Pulso celer o "en martillo de agua": es un pulso de ascenso y
descenso muy rápido. Aparece cuando el volumen de eyección
es alto y las resistencias periféricas son bajas; es típico de la
insuficiencia aórtica (pulso de Corrigan) (MIR 98F, 255).
Pulso alternante: pulsos fuertes y débiles de forma alternada.
La alternancia mecánica es un signo de disfunción miocárdica
grave. Es fácil diagnosticarla por esfingomanometría, cuando la
presión sistólica alternante es mayor de 20 mmHg.
Pulso bigeminado: es originado generalmente por extrasístoles
ventriculares que aparecen después de cada latido normal,
alterando así la fuerza del pulso.
Pulso paradójico: se caracteriza por una caída exagerada
(porque en condiciones normales disminuye ligeramente) de la
presión sistólica durante la inspiración, mayor de 10 mmHg. Se
debe a la disminución del volumen de eyección del ventrículo
izquierdo y a la transmisión de la presión negativa intratorácica
a la aorta. Es frecuente en: taponamiento cardíaco, pericarditis
constrictiva crónica, enfisema pulmonar, shock hipovolémico,
tromboembolia pulmonar, embarazo, obesidad extrema.
Todas ellas son situaciones en que se compromete
la diástole del ventrículo derecho, dada su
pared fina, por aumento de la presión extrínseca (líquido en el
taponamiento, aire en el enfisema…). Así, el llenado ventricular
encuentra resistencia y se expande desplazando el tabique
interventricular, limitando el llenado del ventrículo izquierdo,
con la consiguiente disminución en el volumen telediastólico
del mismo y, por tanto, del volumen sistólico.
Pulso hipocinético: es un pulso pequeño, y se encuentra
cuando hay disminución del volumen de expulsión o cuando
aumentan las resistencias periféricas.
Pulso hipercinético: se trata de un volumen de eyección elevado,
con resistencias periféricas bajas. Se encuentra en los
estados hipercinéticos, bloqueo cardíaco completo y bradicardias
(los dos últimos por alto volumen telediastólico ventricular,
dada la diástole larga en presencia de bradicardia).

2.1.- Pulso venoso yugular
2.3.- Ruidos cardíacos